Desarrollar la Creatividad 15

Hablar de Creatividad es hablar de algo que está implícito en este concepto, y ese algo es la concepción de hombre que tengamos, de una filosofía sobre qué es el hombre y la vida.
Según el hombre que pensemos, así será la Creatividad a la que nos estemos refiriendo. También tenemos que referirnos a que tipo de Creatividad nos estamos refiriendo.
Muchísimas de las veces, esa filosofía no está explicitada antes de hablar de creatividad, sino que está implícita en aquello que decimos respecto a la creatividad.
Si pensamos que el hombre tiene un poder limitado de creación, posiblemente lleguemos a pensar en una teoría asociacionista de la creatividad, o la bi-sociación de Koestler, en las que nuestro papel solo se limita a relacionar cosas anteriores, ya dadas.
Si nos paramos dentro de una concepción materialista del hombre, lo pensaremos creativo si logra producir ideas útiles para la sociedad. Por lo tanto, nos daremos cuenta -tal como hizo Guilford- que la creatividad es algo muy olvidado y limitado en nuestra sociedad.
Un hombre 'como ser inmaduro' podrá desarrollar una creatividad empobrecida por el poder determinante de su docente, cosa que por suerte, la realidad nos ayuda a verificar que muchos alumnos logran evitar y sobreviven.
En cambio, si pensamos y creemos en un hombre totalmente libre, con amplias posibilidades de crear y crearse, si entendemos que el hombre tiene que poder auto-desarrollarse, con un potencial infinito -por lo menos en su magnitud- estaremos pensando en la Creatividad como un soporte fundamental de su mismo ser. 
En las próximas entradas desarrollaré aspectos fundamentales y en consonancia con esta entrada.